domingo, 2 de enero de 2011

Memorias de una celda II

DE SI UNO ES CAPAZ DE MATAR


¿ Os habéis puesto alguna vez a pensar cómo es matar a alguien?¿ Sabéis si es fácil o difícil matar a alguien?¿ De cuantas maneras se puede matar a una persona?
La primera pregunta no la puedo contestar yo, por eso agradecería que vosotros me lo contarais por medio de comentarios, que se abrirá un diálogo, saber quien de vosotros mataría, si necesitaría un motivo para matar, o si seria capaz de matar sin motivo. Matar en un momento de sangre caliente, no es difícil, pero matar a sangre fría ya lo es más, y matar a sangre fría y sin motivo aun sube unos cuantos grados. En realidad matar no es nunca una cosa fácil. No es fácil desde el punto de vista del que mata. Requiere ser de una pasta especial, si Dios hizo al hombre de barro, el barro que utilizó para aquellos capaces de matar a alguien a sangre fría y sin motivo era otro, de mayor calidad, aunque uno piense que es un barro podrido.
Cuando uno quiere matar a sangre fría lo primero que debe pensar es que tipo de arma utilizará. Puede escoger:- su cuerpo ( manos, brazos, piernas…) para estrangular o para golpear:- objetos contundentes con los que golpear o lanzar, como bastones, barras de hierro , o piedras o cualquier tipo de peso;-objetos cortantes, cuchillos, navajas, cuchillas, etc;- armas de fuego, cortas o largas;- venenos y sustancias que causan la muerte por intoxicación;- i muchos otros más sofisticados.
Otra cosa que ha de preguntarse quien quiera matar a sangre fría es como quiere que muera la víctima, lentamente, de manera rápida.¿ Se recreará con la tortura, disfrutará con las expresiones de dolor , de la debilidad del futuro muerto?
Yo tengo mis preferencias, e iré contándolas a vosotros en los siguientes post.
Descansar en paz, al menos esta noche.

YO PSICÓPATA

Como ya he dicho antes, me “catalogaron” de psicópata. La verdad es que yo no había leído nunca nada sobre psicópatas, más allá de las noticias que salen en la prensa, o de algunas referencias, y la visión que dan es la de que un psicópata es un monstruo. Cuando fui detenido, tuve una conversación con el abogado de pago que aceptó defenderme. Cuando el leyó el atestado de la policía y vio las fotografías quiso que tratasen de darme por loco. Ahhh, aún no os he contado como fue la detención eso merece un post especial, pero resumidamente una noche sentí el grito de la sangre, salí a buscar a una víctima i la encontré, así que una vez descuartizada no cabía en el congelador, tuve que sacar uno de los más antiguos, y en un control rutinario fui detenido, ya en casa encontraron el congelador lleno de carne.
Como los infrahumanos piensan que aquella persona capaz de quitarle la vida a otro sin motivo a sang-froid debe de ser un loco, mi abogado quiso utilizar la locura como eximente completa, es decir, que yo no se lo que me hago, que no distingo el bien del mal, con esto me condenarían a una pena sustitutoria, a recibir un tratamiento en un psiquiátrico, pero no iría a la prisión. El abogado era un tipo que hablaba claro, y me dijo que si yo era un psicópata no me libraría de la prisión y que sería por muchos años. Que de mi dependía si quería ver al médico forense o no.
Yo sabia que estaba sentenciado, la había cagado, me habían detenido, habían encontrado la carne en el congelador, no tenia salida. Tenía sentido, podía hacerme pasar por esquizofrénico, si lo hacia bien tal vez lo conseguiría.
Lo cierto es que me hicieron muchas pruebas. Me hubiese gustado haber podido leer mucho sobre la esquizofrenia, pero en la prisión controlan y toman nota de todo lo que te llega y habría “ cantado” mucho que yo me pusiera a leer de la esquizofrenia justamente cuando quiero que me traten como un esquizofrénico. No, no podía. Así que tuve que tirar de los conocimientos que adquirí en las asignaturas de psiquiatría en la facultad, y tratar de hacer el papelón con esos conocimientos. No lo hice nada mal, y al principio, aunque el psiquiatra que me veía no me decía nada, pensé que me saldría bien.
Este psiquiatra desde un primer momento optó por saber si yo soy psicópata o no, y he dicho que en principio me salía bien, porque los primeros tests y las primeras pruebas no eran concluyentes, ya que me las repetía muchas veces. Tanto es así que llegaron a hacerme tomografías por emisión de positrones para tratar de ver si había actividad al lóbulo frontal delantero de estímulos empáticos.
También me hicieron pruebas consistentes en tratar de que reconociese el estado de ánimo de una persona nada más viendo fotos. Al final determinaron que soy psicópata, que puedo distinguir el bien del mal, que no tengo remordimientos, que soy mentiroso y manipulador, que veo a las personas como objetos, etc. Todo esto no son más que tonterías, para no reconocer quien soy, como dije en el anterior post, de otro tipo de barro.

A.M.B.S




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